martes, 21 de octubre de 2008

Tenis


Yo nací –perdonadme-
en la edad de la pérgola y el tenis.
Jaime Gil de Biedma.

Desde hace algunos fines de semana juego al tenis con mi hijo Juan o con mi amigo Manolo Belmonte. La práctica ya me ha causado algunos percances: dolor en el hombro, pies cargados, sudoración excesiva... Ahora que los cuerpos se debilitan hay que mortificarlos con estos ejercicios que sólo conducen al agotamiento final. Dice, sarcástico, mi aristocrático amigo Miguel Salazar que el deporte y el esfuerzo son “vicios de pobre”. Pero en el tenis la estampa previa —pantaloncito corto y raqueta empuñada— no puede ser más fina.

Esta reciente y atlética costumbre me ha traído a la memoria dos imágenes. Una, de la que no conservo evidencia, es la de los partidos en una de las pocas pistas de arena —camino de La Puebla— que había en Zafra allá por 1977 o 1978. Le pedíamos la llave a un compañero de trabajo de mi padre y pasábamos las tardes dándole a aquellas antiguas raquetas de madera.

Del segundo recuerdo sí tengo fotografía. Eran las vacaciones de verano de 1981. Mariano Luque, Manolo Belmonte y yo viajamos a Pedralba, en Valencia, invitados por Anabel Golfe. Algunas mañanas íbamos a jugar al tenis a unas pistas en las afueras del pueblo. Teníamos menos años y menos kilos. El otro día, mientras jugaba con Manolo, me vino a la cabeza la historia de nuestra aficion y la insolencia de nuestros cuerpos de antaño.

6 comentarios:

Los viajes que no hice dijo...

Ya no hay cuerpos como los de antes... Nos ponemos barrigones a los 20, rediós.

Anónimo dijo...

Hay que comer menos Jose María, no hay excusas, Mira Manndona cómo esta de Buena y ya tienes sus añitos.

Anónimo dijo...

Cuando quieras cambias la raqueta y jugamos al tenis, pero de mesa, rememorando aquellos partidos épico con "chocolate" (minúsculas) y cia, que lo que menos importaba era el resultado y lo que más el ambiente de los "ultras" (pimentón incluido) a un lado y otro de la mesa a punto de sacar las armas en cualquier momento, Kameraden

Anónimo dijo...

Jose María: Esto no tiene nada que ver con la entrada pero me permito mandartelo por este medio, por si lo quieres poner después de verlo;

http://www.lepoison.com/sidaction/

Me parece una buena publicidad sobre el SIDA, impactante y que llega, hay que estar alerta porque tenemos a mucho canalla suelto. Algún día te hablaré directamente, cuando nos veamos en alguna conferencia, por qué lo digo.
Saludos

Anónimo dijo...

No me queda mas remedio que hacer un comentario sobre los cuerpazos que teneis.......... ahh no??.. que la foto no es de ahora??..quién lo diría!!.
Dale un besazo a mi amigo Manolo Belmonte y dile que los años no han pasado por su body ..(ni por el tuyo)
Gemma

Anónimo dijo...

y por qué iban en gallumbos?? acaso entonces no habia menores???